Ilusión nocturna en las tinieblas

Y de pronto el mundo se volvió vacío, como si fuese una ilusión que desvanece, 

con la mirada en un laberinto oscuro, 

no encontraba su verdad en la neblina.

Y de pronto solo el vacío se impuso, 

una mente deshecha, sin cohesión, 

se perdía en la bruma del tiempo, 

navegando en la marea de desolación.

La ilusión nocturna devoró el todo, 

arrancó cada recuerdo con su sombra, 

pero en su esencia, la oscuridad no pudo, 

y de su ceniza, renació la magia, el misterio.